Miseria

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  La secuencia gráfica se ha dado a conocer en toda la prensa nacional e internacional, porque estas fotos ya le están dando la vuelta al mundo. Ocurrió en la Isabelica, Valencia.

  En la primera foto, una mujer menuda, con un vestido largo, muy delgada, es tomada por una mujer gruesa que además está protegida con chaleco anti balas y casco de la Guardia Nacional. La toma por el cabello con una mano y con la otra la toma por ambos puños. Fácilmente la hace rendir -como vemos en las dos fotografías que siguen en la secuencia- hasta que la derriba al piso. Cae la mujer –que luego nos enteramos es costurera- y queda con los brazos abiertos contra el pavimento.

La mujer de la Guardia Nacional se monta a horcajadas sobre ella, de manera tal de aprisionarla totalmente, en una actitud, por decir lo menos, humillante y peligrosa. Por si fuera poco, se quita entonces el casco y, sin ocultar una sonrisa perversa, cargada de morbo, de odio, empieza a golpear con el casco a la mujer que está tendida en el piso, inerme, indefensa. Esto ante la pasiva mirada de unos seis o siete compañeros de la mal llamada Guardia del Pueblo.

  Es apenas uno de los tantos incidentes que han ocurrido y que están perfectamente documentados en las redes sociales.

  En el Zulia, un funcionario pistola en una mano y garrote en la otra, corre tras un estudiante despavorido.

  Según el señor Nicolás Maduro, todos son montajes de twitter. Le gusta al señor perder la noción de la realidad, y la realidad para él se empieza a limitar al twitter.

  Eso es lo que le permite, por ejemplo, ponerse a bailar, indolente ante la tragedia. Porque Maduro los muertos, los heridos y los detenidos no están en twitter, están detenidos en sus cárceles, fueron heridos por sus funcionarios y fueron asesinados gente que usted ampara y protege, sean uniformados de la Guardia Nacional Bolivariana o sean los motorizados esos a los que usted ayer homenajeó con mucha salsa y merengue.

  En un país de luto es un gran acto de inconsciencia ponerse a bailar salsa, y usted lo ha hecho ya por dos días seguidos, indicando que sí, que es un acto de desprecio, que usted desprecia a los caídos, a los sufridos, a  los que le adversan.

  Y llegamos al colmo con esta declaración que leo en El Universal: “La Guardia Nacional Bolivariana ha actuado apegada a ley”. Dice Maduro: “Si algún funcionario en medio de tantos tanques hubiera cometido abusos lo hubiésemos entregado porque aquí nadie está autorizado a abusar de los Derechos Humanos de nadie. Si no fuera por la Guardia no tuviéramos la paz de la que hoy gozamos en más del 90% del territorio, porque se la han jugado por la paz con mucha paciencia escuchando insultos de estos grupos violentos”.

  ¿De qué esta hecho el señor Maduro? ¿Cuál es su catadura ética, moral? ¿Cuál es la catadura ética y moral de él, del Comandante de la Guardia Nacional, del Alto Mando Militar, del alto Gobierno? ¿Cuál es la catadura ética y moral de la señora Luisa Ortega Díaz, Fiscal General de la República? Leo esta declaración suya en la primera página de El Universal:

  “¿Ustedes creen que una persona que haya sido violada, que le hayan introducido por el ano la punta de un fusil pueda sentarse en la audiencia de presentación? que desagradable hablar de esto, practicado el reconocimiento médico legal, no es cierto que haya introducido el fusil.”

  Los venezolanos, en su mayoría, somos bastante más dignos que esto. Los venezolanos, en la inmensa mayoría, somos un pueblo que tradicionalmente se ha mostrado noble, digno, generoso… De ninguna manera merecíamos esta miseria.