Salud pública y terrorismo

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  El Nacional hoy en su gran titular de primera página enciende las alarmas: “La salud colapsa y no tendremos atención pública ni privada, dice el Director Ejecutivo de la Asociación de Clínicas, el doctor Cristino García”, el mismo que ayer nos revelará que están suturando con hilo elefante, ya como advirtiendo que hemos llegado al colmo de los colmos. “Están agotados 35.000 medicamentos”, informa el diario.

  Más abajo de esta noticia se lee una más pequeña que dice: “Murieron 8 personas por infección general y hemorragia febril en el Hospital Central de Maracay. Cuatro adultos y cuatro niños llegaron al centro de salud de la capital de Aragua con manchas en el cuerpo que se convirtieron en ampollas, fiebre alta, pequeñas hemorragias que devinieron en pérdida de sangre masiva y fallas multiorgánicas que les habrían causado la muerte. Los médicos descartaron que sean víctimas de meningoccemia, ébola, dengue o chikungunya. Se supo que uno de los enfermos presentaba estomatitis y en menos de 24 horas después de su ingreso falleció de un paro respiratorio y sepsis en la piel.” Notitarde en la vecina ciudad de Valencia: ”8 personas habrían muerto por enfermedad desconocida en Hospital de Maracay”.

  Ante esta noticia qué hace un gobernante serio. Enfrenta el asunto y trata, primero, de calmar a la población, y segundo busca de inmediato los correctivos.

  Recordemos, toda la salud en Venezuela está en crisis, y como bien dijo Cristino García nos vamos a quedar sin salud pública ni privada. A esto agregue usted este elemento que genera pánico.

  Pero cómo reaccionan los gobernantes de esta revolución y sus obsecuentes medios. Últimas Noticias: “Desmienten muertes extrañas en Maracay. Hospital central funciona sin restricciones”. El Clarín, en la ciudad de la Victoria: “Falsos rumores sobre la bacteria. El gobernador de Aragua, Tareck El Aissami, desmintió al Presidente del Colegio de Médicos, Ángel Sarmiento, quien habría declarado que ocho personas fallecieron en el Hospital de Maracay por una enfermedad no identificada.” El Periodiquito, en Maracay: “No hay virus en el Hospital Central. El gobernador de la entidad Tareck El Aissami desmintió las versiones que circularon en las redes sociales sobre la presencia de bacterias en el Hospital de Maracay y apuntó que se trata de una campaña de rumores y terrorismo.”

  ¿Cómo va a ser esa la declaración de un gobernador? ¿Terrorismo?

  Luis López, subalterno de El Aissami, Director Regional de Salud, “rechazó la existencia de virus o enfermedades que pongan en riesgo la salud de los pacientes del referido centro asistencial. Tildó de irresponsable las declaraciones del Presidente del Colegio de Médicos y adelanto que en los próximos días deberá probar ante la ley las denuncias hechas ante la opinión pública.”

  Después de leer estas reracciones, no les extrañe a ustedes que esto sea toda una campaña perfectamente orquestada por la CIA, que su origen esté en Miami y que sea un virus inoculado o una bacteria inoculada, así como, según Maduro, le inocularon el cáncer a Chávez.

 

 

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