El usurpador, el gobiernito y la sanación espiritual

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  Acusó el golpe el señor Maduro. Gran titular en El Clarín de La Victoria: «No somos un gobiernito». Mucho se ha señalado al señor Maduro de ser un usurpador y de encabezar un «gobiernito». Pues acusó el golpe, él dice: «No somos un gobiernito, sino una revolución popular socialista».

  El detalle con el señor Maduro, lo define hoy muy bien el diario El Universal, en el editorial en primera página -El Universal no suele hacer esto y ya lleva dos editoriales en esta semana-: El Vicepresidente Ejecutivo de la República no es un funcionario de elección popular. Nicolás Maduro fue designado por el presidente Hugo Chávez, quien está ausente del país desde el 11 de diciembre del año pasado sin ofrecer declaraciones a los medios o encabezar actos oficiales. Sólo dos poderes públicos son escogidos en elecciones por los ciudadanos: el Poder Ejecutivo y el Poder Legislativo: De allí la lógica Constitucional en cuanto a que si se produce una ausencia temporal o absoluta, quien suple al Jefe del Estado es el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello. No Nicolás Maduro, Vicepresidente Ejecutivo.

  Como bastante lo han dicho los estudiantes: ¿Quién eligió a Nicolás Maduro? De allí que muchos le refieran como el “usurpador”.

  En todo caso, ayer le tocó presentar la Memoria y Cuenta del año pasado ante la Asamblea Nacional, y lo hizo con un discurso anodino y absurdo. Por ejemplo, gran titular en El Correo del Orinoco: “Maduro convocó a un esfuerzo nacional contra la inseguridad”. Pero ¿de qué manera lo asume? Le cito: “Tenemos que convertir esa fábrica de malandros en una fábrica de bienandros (…) Estamos actuando, pero estamos prestos en actuar aún más en todos los frentes de batalla, incluida la corrupción en la justicia venezolana que genera una impunidad tremenda”. – y ¿por qué no actúa? – “Tenemos que ir a un proceso de sanación espiritual de la sociedad venezolana”. Se lee en una de las citas que le hacen en el diario El Nacional.

  ¿Cómo se logra eso, señor Maduro? ¿Cómo es ese proceso de sanación espiritual? ¿De qué estamos hablando?

  Esto cuando leemos a un país que prácticamente está haciendo aguas. Citan en El Nacional, en primera página, las declaraciones que en el programa de radio por el Circuito Éxitos, nos diera el martes de esta semana el economista Roberto Rigobón del MIT: “La escasez de alimentos de Venezuela es como la de un país en guerra o víctima de una desgracia natural”. Y nada de eso nos ha pasado, todavía. Del mismo foro en el IESA, el profesor Pedro Luis Rodríguez: “El Gobierno destinó al subsidio de la gasolina, -atención Rafael Ramírez- 16 millardos de dólares el año pasado, casi 550 dólares por persona, más de lo que le dedicó a la salud”.

  Un país que va literalmente a la deriva, y este señor habla de la sanación espiritual. En fin….